Aunque pueda parecer extraño, la comida picante tiene numerosas propiedades saludables para el organismo. Los chiles, los pimentones, la cayena y otros alimentos con un sazonado de alto voltaje son unos buenos aliados desde el punto de vista alimenticio. Un aspecto que seguro que a más de uno le llama la atención es que los alimentos picantes queman calorías. ¿Cómo puede ser? Gracias a la capsaicina, una sustancia que se encuentra en los chiles y los pimientos picantes, y que es la culpable de la sensación de ardor en la boca que causan estas hortalizas.

 

Pero la capsaicina no sólo nos lleva a beber agua apuradamente cuando pedimos un plato picante en un restaurante mexicano. También provoca que el corazón y el metabolismo se aceleren debido al aumento de temperatura que experimenta el cuerpo. Así, se activa la quema de calorías. Y otra ventaja que tiene la capsaicina para las personas que cuidan su línea es que genera una sensación de saciedad, con lo que se reduce la ingesta de alimentos.

 

Esta milagrosa sustancia también tiene efectos beneficiosos para la circulación sanguínea. La capsaicina combate la inflamación de las arterias y activa el torrente de la sangre, por lo que es un buen complemento para prevenir las enfermedades cardiovasculares. Al comer alimentos picantes, la temperatura corporal sube y, por tanto, aumenta el flujo sanguíneo. Y la sangre llega mejor al corazón. Por si fuera poco, la gran mayoría de las sustancias picantes contienen altos niveles de vitaminas A y C, que favorecen la robustez de las paredes de los vasos sanguíneos.

 

Varios estudios han puesto de manifiesto que la capsaicina disminuye el crecimiento de las células cancerosas. Tanto es así, que los países cuya dieta contiene numerosos alimentos picantes registran índices de cáncer más bajos. Y, por si fuera poco, este tipo de comida mejora el estado de ánimo porque promueve la generación de endorfinas y serotonina.

 

Además, algunas teorías apuntan a que es un potente afrodisíaco por su elevado contenido en vitamina C. Lo mejor es que la comida picante está muy extendida en todo el mundo, gracias sobre todo a restaurantes mexicanos como Las Taquerías, que han llevado la gastronomía charra al gran público. Si puedes aguantar el ardor, no hay duda de que consumir picante alegra la vida en muchos sentidos.